Esta exposición pretende ser un homenaje y recordar de una forma desenfada, a nuestra tía Amparo Miranda, en el primer aniversario de su muerte.
Sabemos que ella nunca lo hubiera hecho pero también que ahora estará encantada de lo que estamos haciendo.
Con esto queremos también expresarle y agradecerle el amor que tenemos por la pintura y que por lo que estamos viendo va a continuar con nuestros hijos e hijas, a los que les encanta dibujar y pintar. Esta afición salió en buena parte de ella.
Otra persona a la que le encantaría ver esta exposición es a su maestro Don Ramón Cuevas. Llegaron a tener tan buena sintonía que su amistad fue mas allá que la que derivó de las clases de pintura. Algunas obras las pintaron "a medias": las que tienen la firma Rampa (Ramón y Amparo). El resto de personas de su grupo de pintura sí que las va a disfrutar.
Las fechas de la exposición son excelentes: en plenas fiestas de Begoña, las Fiestas de Gijón. Ella las llevaba a "rajatabla" y siempre hacía una comida, porque tanto en esa como en otras ocasiones señaladas siempre quería que la familia estuviese reunida. Además es una época estupenda para que puedan venir personas de la familia y amigos que viven fuera.
